Te propongo cambiar una dinámica de comportamiento de las escuelas en la que caen cautivos muchos docentes “hacer más, en menos tiempo” .Este año ayúdales a “ser más ellos mismos, en ese tiempo”. Déjalos ser, déjalos crear, innovar , déjalos ser maestros .
No le pidas ni exijas tareas que no son pertinentes a su rol docente. Ellos son profesionales de la enseñanza. Aman tanto aprender cómo enseñar. No desperdicies los tres recursos más valiosos de un docente; Su tiempo, su talento para enseñar y sobretodo su energía.
Hoy en dia , en las escuelas , la energía personal de los docentes es el recurso más valioso. Puedes encontrar en tu escuela un genio de la educación, que tiene un sinfín de magnificas cualidades para enseñar y un plan perfecto para llevarlas a cabo. Pero si no tiene energía todos los días , al final no habrá ningún resultado. Nunca como en estos tiempos cambiantes ha sido tan fácil descentrar a los maestros de su tarea , pidiéndole que pasen los días haciendo cosas inútiles , perdiéndolos en los detalles .Y esto acaba con su energía .
Si quieres maestros brillantes ayúdales a centrarse en las tareas realmente imprescindibles. Ayúdales a hacer menos cosas pero mejores. Ayúdales a centrarse en enseñar y aprender.
Los buenos maestros se marchitan en ambientes donde no son reconocidos, ni valorados ni apoyados. El esfuerzo reiterado sin reconocimiento termina cediendo al cansancio, al agobio y a la mediocridad.
Los buenos maestros florecen cuando los cuidas, los reconoces, los apoyas y alientas.
Cuida la mente de los maestros, no los atiborres con discursos repetitivos , y chismorreos negativos. Háblales menos y escúchalos más .Recuerda que uno de los deseos ,más profundos del ser humano es el deseo de ser comprendido. Y los docentes también son seres humanos! Basta de pedirles que se arranquen las emociones y problemas de su corazón antes de entrar a la escuela . Ellos son seres emocionales como cualquier otro mortal Las emociones van con ellos a todos lados. Su corazón está conectado con un delicado hilo invisible al corazón de cada uno de sus alumnos. Cuando sus pequeños ríen, los maestros también ríen, cuando sus pequeños sufren , los maestros también sufren , cuando sus pequeños aprenden los maestros estallan de felicidad. .Están conectados entre si .Esto es difícil de comprender sino eres docente ., pero este hilo invisible existe y se llama vocación .
Si en tu escuela la prisa, la presión y la indiferencia hacia la tarea docente apago la vocación .Recuerda que ella sigue allí, solo está dormida. Despiértala como se despiertan a las princesas en los cuentos de hadas. Con un beso de verdadero amor.
Deja de preocuparles por todo lo que no pueden controlar y estimúlalos a dedicarse a mejorar lo que sí está en sus manos.
Reconoce la excelencia. Alaba el buen trabajo. Honra su maestría.
Mariana de Anquin
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